Últimamente algunos padres se han declarado en contra de la vacunación infantil, incluida la vacuna de la varicela, marcando una nueva tendencia que, a nuestro modo de ver, deja a sus hijos expuestos a coger cualquier enfermedad y lo que es más grave, convirtiéndose en un peligro potencial como posibles transmisores de enfermedad para otros niños y adultos que por diversos motivos (edad insuficiente para vacunarlos, personas con deficit inmunitario por alguna enfermedad, etc) están más expuestos a enfermar.
⇒ Opiniones sobre la vacunación – La Vacuna de la Varicela
Esta tendencia de no vacunación viene justificada por diversos motivos, siendo los pilares fundamentales dos, los efectos secundarios que pueden provocar las vacunas en el desarrollo de los menores, llegándose a hablar de problemas de autismo en un índice más elevado de menores en los últimos años y la propia inmunización de los niños de manera natural durante su desarrollo, que les llevaría a obtener esa protección de manera interna al exponerse a las enfermedades.
⇒ Nuestra opinión sobre la vacunación
En nuestro caso, podríamos decir que somos unas férreas defensoras de la vacunación, cierto es que con un abuelo pediatra gran parte de nuestra información al respecto esta basada en una experiencia médica de más de treinta años y un soporte científico al respecto.
Lo que más curioso nos parece de los argumentos esgrimidos por los defensores de estas nuevas tendencias, es lo sencillo que supone pasarse por el forro del moño siglos de estudios científicos e investigación que ha demostrado erradicar enfermedades altamente mortales para hablar de suposiciones sin fundamento real.
Al hablar de la autoinmunización ante la exposición a las enfermedades es básicamente presuponer que todos los seres humanos estamos preparados para superarlas o que es más productivo exponernos a la selección natural como ocurría en otros periodos y así los más fuertes sobrevivirán pasando por alto todas las personas que pueden quedar mermadas por las consecuencias del desarrollo de ciertas enfermedades.
Más gracioso nos parece fudamentar el desarrollo de ciertas enfermedades tipo autismo como un efecto secundario de la propia vacunación temprana, sin pararnos a valorar simplemente lo que pueden afectar los hábitos de vida desarrollados por los progenitores en sus años de vida (alimentación, trabajos desarrollados con exposición a agentes contaminantes, hábitos nocivos como tabaco, drogas, etc), el entorno y otras circunstancias que puedan afectar al desarrollo de esta u otras enfermedades de manera precoz.
¿No es un poco partidista buscar culpables de manera externa?
Quizá nuestra opinión esta muy dirigida y muchos de vosotros discrepareis, pero la erradicación de las enfermedades, así como la prevención de pandemias gracias a la vacunación son un hecho fundamentado con un aumento de la supervivencia y longevidad del ser humano y sustentado en muchos estudios científicos que soportan la existencia de un calendario de vacunación.
⇒ ¿Cuándo poner la Vacuna de la Varicela?
Siguiendo el calendario de vacunación (ver arriba, no suele variar de un año a otro, ni tampoco de comunidades), fuimos al centro de salud a la revisión de los 15 meses y le pusieron la Vacuna de la Varicela y del Neunococo con Prevenar 13.
Ahora a los 3 años la han vacunaron con 2 pinchazos, uno para poner la 2ª dosis de la vacuna de la varicela y otro para la triple virica (sarampión, parotiditis, rubeóla).
La 3ª y la última dosis es a los 12 años como bien pone en el calendario de vacunación.
En nuestro caso la niña no tuvo ninguna reacción ni a estas 2 vacunas, ni de momento a ninguna otra.
Y vosotros ¿estáis a favor como nosotras de seguir el calendario de vacunas para que vuestros hijos estén protegidos de posibles enfermedades? Déjanos tu opinión.